lunes, 22 de septiembre de 2014

Ensayo: La Educación en la Sociedad del Conocimiento

LA EDUCACIÓN EN LA SOCIEDAD DEL CONOCIMIENTO



Hablar de educación hoy, contemplando los cambios que presenta la sociedad actual en torno a procesos de modernización y comunicación a gran velocidad, requiere necesariamente cambios radicales en la praxis pedagógica. En este sentido, la educación debe hacerse cargo de la transformación que experimenta el contexto cultural inmediato y de la influencia de las tecnologías de información y la comunicación en el incremento y evolución de la sociedad contemporánea; razón por la cual, la interpretación de la globalización no debe ceñirse en sus efectos sobre la educación, sino, como parte de su entorno, en el que ella opera y al cual debe responder y adaptarse.
El papel de la educación en la era moderna, entonces, debe centrar su acción en la comunicación y la información como elementos que están al servicio de la transmisión y construcción del conocimiento, en su extensión en el espacio y  su influencia en las generaciones modernas asumidas como la aldea global.  Su acción debe operar a través del desarrollo de contenidos digitales significativos, pertinentes, así como en el fortalecimiento de las competencias necesarias para el uso apropiado de las mismas. Repensar la educación debe considerar las TIC como un espacio activo que genere nuevos ambientes para el aprendizaje respetando los principios de participación y equidad, por lo que la inclusión digital debe ser asumida como un asunto de corresponsabilidad entre el estado y la escuela, donde juntos busquen el mejoramiento de la educación traspasando las brechas abismales que existen, ya que como lo expresa Chen y Wellman (2004) “no hay una brecha digital, hay muchas divisiones”, dado que los estudiantes menos favorecidos económicamente tienen menos oportunidades de hacer buen uso de las TIC y los más favorecidos se encuentran mediatizados permanentemente por ellas.
Es evidente la necesidad de activar el proceso de inclusión digital que favorezca también a las poblaciones vulnerables, entre ellas, la población escolar rural, quien hace algunos años se encuentra medianamente incluida en los proceso de accesibilidad tecnológica, pero carece de procesos más profundos como la alfabetización digital que permiten el buen uso de la información para el aprendizaje y adquisición del conocimiento. Desde esta perspectiva, se evidencia la necesidad de transformar el acto educativo del nuevo siglo. Es indispensable generar y proporcionar ambientes de aprendizaje mediados por las TIC, que permitan transformar la praxis pedagógica de forma  innovadora, propiciando nuevas estrategias de enseñanza que posibiliten la adquisición de conocimientos incrementando la motivación para el aprendizaje siendo este el elemento fundamental para que exista un aprendizaje significativo, de ahí la gran inquietud investigativa cuando el común denominador en el contexto escolar actual está mediado por la desmotivación e indiferencia ante el proceso enseñanza- aprendizaje.

Traspasar la brecha digital, es un paso necesario para garantizar el pleno desarrollo de la ciudadanía y poder hablar de inclusión digital. Por todo esto, las buenas prácticas que suponen las experiencias innovadoras que generan procesos de inclusión digital son la ruta a seguir para mejorar la educación en los nuevos escenarios de la sociedad del conocimiento.

No hay comentarios:

Publicar un comentario